Combatir el Bullying en una sociedad que promueve valores como el rechazo a la excelencia o la negación de la diversidad es una tarea ardua. Cada vez estoy más segura de que la empatía es la clave para erradicar el acoso en todas sus formas, tanto entre niños como en padres y madres.

La empatía debería ser una materia obligatoria para niños y adultos. Vivimos en una época donde lo diferente es visto como una carencia y donde la excelencia es motivo de envidias, recelos y rechazo. Hemos dado un gran paso, hemos conseguido hablar del Bullying y se le está poniendo remedio, sin embargo, está adoptando nuevas formas de acoso silencioso.

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Cada vez se valoran menos las materias como filosofía o expresión artística, y la inteligencia emocional aún no ha llegado a las aulas… En esta sociedad hay muchos niños que tienen buenas notas en sus materias, pero un cero en educación. Se les enseñan materias que en un futuro los haga rentables pero no se les enseña a convivir. ¿Y de quién aprenden? De nosotros, sus padres y madres.

El Bullying silencioso no solo es cosa de niños. Me consta que muchos padres y madres se sienten solos. Porque cuando haces algo diferente, o cuando destacas, te etiquetan, te marcan y te apartan.

Algunos padres y madres también sufren Bullying o acoso silencioso por parte de otros grupos de padres y madres. Y los adultos con su ejemplo, estigmatizando lo diferente y etiquetando a otros padres, madres e incluso a niños, ejercen la indiferencia. Entonces, si los padres no practican la empatía ¿cómo van a enseñársela a sus hijos?

Los cumpleaños que deberían ser plurales, se convierten en grupos que celebran la exclusión dejando fuera a uno o a unos pocos niños… Con esta actitud los padres y madres fomentan en los niños la insensibilidad. ¿En qué momento esto empezó a parecer normal?

El Bullying silencioso de las aulas es reforzado por las actitudes de los padres. No seamos espectadores, no fomentemos el acoso con nuestro silencio, pero por favor, mucho menos con nuestro ejemplo.

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Estamos trabajando para erradicar Bullying tal y como lo conocemos, no permitamos que adopte nuevas formas.

Autor: Natalia Matrelle