En Txokolate solo trabajamos con los mejores profesionales para dictar nuestros talleres, en esta ocasión contaremos con AURREZ AURRE, un equipo de psicólogos y educadores que velan por nuestra salud emocional, trabajan en el área del bienestar social infantil y juvenil, pero sobre todo ayuda a que las familias seamos mas felices y tengamos una vida emocional mas saludable.

Ellos son AURREZ AURRE. ¿Quieres conocerlos mejor? Te invitamos a leer la siguiente entrevista:

¿Qué es Aurrez Aurre y por qué surge?

Aurrez Aurre surge de la necesidad de cambio que observamos tras hacer un exhaustivo análisis del sistema educativo (y de la educación en general -en casa, en la familia, entre amigos…-). Existen actualmente ciertas costumbres o clichés anticuados que se siguen tomando como referencia y son utilizados como herramientas base para la ayuda al desarrollo de los más jóvenes y que nosotros creemos que deberían adaptarse a los nuevos conocimientos y a la realidad actual. Por otro lado, hay aspectos en la educación que se han obviado durante siglos y que creemos que son importantísimos de tratar, como la autoestima, la empatía, el desarrollo de la imaginación, la capacidad analítica y crítica… y la inteligencia emocional, básicamente. Nos embarcamos, por lo tanto, en esta cruzada con la intención de aportar nuestros granitos de arena en ese cambio que, bajo nuestro punto de vista, es necesario para poder construir un futuro mejor y llevar una vida y una convivencia plenas y felices.

Oier y Aida, junto con más colaboradores, formáis un equipo multidisciplinar ¿cuáles son vuestras especializaciones?

Aida es psicóloga (especializada en psicología clínica) y cuenta con un master en musicoterapia. Se ha formado en inteligencia emocional, bullying y otras especialdades relacionadas. Yo (Oier) provengo del mundo de la educación y de las artes; soy músico, director de cine, actor y director de teatro y he ejercido de profesor (con jóvenes y adultos) en estas disciplinas durante años. Ambos combinamos nuestras competencias con otros colaboradores (especializados en drogodependencias, pedagogía, sexualidad…) para poder ofrecer un servicio completo y de calidad en el que, por encima de todo, prima la forma dinámica, lúdica y creativa que tenemos de abordar estos temas, pues está más que demostrado que todas y todos aprendemos más y mejor cuando nos lo pasamos bien.

Desarrolláis actividades en distintos ámbitos desde el trato directo con las familias, hasta la formación en los ayuntamientos. ¿Cuales son las actividades que desarrolláis y cuál es vuestra misión?

Comenzamos nuestras andanzas con la intención de intervenir únicamente en centros educativos (escuelas, ikastolas, institutos…) pero, poco a poco, fuimos ampliando fronteras porque, como hemos dicho antes, la educación no termina al salir de la escuela; continúa en casa, en el parque, con los amigos… Es por eso que decidimos actuar también en todos estos espacios. A día de hoy ofrecemos desde terapias emocionales individuales tanto para adultos como para jóvenes, hasta actividades de ocio en las que trabajamos la inteligencia emocional por medio de diferentes herramientas (juego, deporte, artes…). Nuestra intención es suplir esa carencia que observamos en este aspecto para poder dar a todo el mundo la oportunidad de beneficiarse de ello.

Jean Jacques Rousseau destacaba la importancia de la educación emocional infantil, distinta de la educación emocional en adultos. ¿Por qué es tan importante?

La inteligencia emocional nos hace ser personas más resolutivas, dueñas de nuestros propios actos, maduras, capaces de solucionar problemas, de comunicarnos con el resto, de superar baches, de liderar situaciones diíciles… ¿No son acaso éstas cualidades las que a todo humano nos gustaría poseer?

La inteligencia emocional nos hace ser personas más resolutivas, dueñas de nuestros propios actos

Desde pequeños nos enseñan a sumar y restar, a leer y escribir, memorizamos datos e interiorizamos teorías y conocimientos… lo cual es muy importante. Pero nos olvidamos de algo básico: educar nuestras emociones para ser más inteligentes en este aspecto. De nada me sirve ser el mejor ingeniero del mundo si ante un problema personal me derrumbo y dejo de rendir como debería; no me vale de nada ser el mejor en la carrera de derecho si soy incapaz de comunicarme con los que me rodean, o no puedo controlar mi ira ante cualquier adversidad. Hay personas con coeficientes intelectuales altísimos que no han podido disfrutar de una vida plena (incluso en sus trabajos) por no tener la capacidad de comunicar, liderar, controlar sus estados de ánimo o entender a los de su alrededor. 

Esto es algo que hay que empezar a trabajar desde una edad muy temprana. Aprender a conocerse a uno mismo, a los demás y a interactuar en consecuencia es un proceso lento y constante que habría que abordar desde la infancia para poder contar con las herramientas y la fortaleza suficientes para enfrentarse a los problemas adultos.

Los domingos 26 de marzo y 1 de abril impartiréis en Txokolate los talleres JOLASTEN Y MUSIKATU. Cual es el planteamiento para estos dos talleres? 

“Jolasten” es un taller centrado en el desarrollo de la creatividad y la imaginación en el juego. Cada vez más, contamos con juguetes y juegos excesivamente pautados que merman la capacidad de inventar, imaginar y desarrollar nuestra mente. El niño que sea capaz de inventar un universo a partir de un simple palo será el adulto que pueda crear cosas, innovar en proyectos, buscar soluciones a problemas y dar pasos adelante cuando parece que el camino no tiene salida. Si nos educamos y crecemos rodeados de elementos y actividades en las que constantemente se nos dice qué es lo que tenemos que hacer o nos dan vías únicas y caminos trazados, cuando llegue el día en el que tengamos que tomar las riendas de nuestra propia vida, no vamos a saber qué hacer, vamos a estar perdidos y nos vamos a sentir frustrados, impotentes y con más miedos de los que deberíamos. En “Jolasten” daremos pautas y alternativas que ayuden a trabajar estas capacidades.

“Musikatu” es un taller en el que descubriremos la importancia de la música como herramienta para trabajar emociones, sentimientos y conexiones entre diferentes personas. En este caso concreto, las relaciones en familia con los más pequeños.

Podéis darnos tres claves fundamentales para educar emocionalmente a nuestros hijos? 

¡Jajaja! No existe una fórmula mágica. Hay muchas maneras de trabajar la inteligencia emocional pero, tenemos que tener en cuenta, que es una carrera de fondo. No podemos pretender ser inteligentes emocionalmente con solo realizar un taller o una actividad concreta y aislada. De todas formas, os diremos que hay tres pilares centrales para empezar a trabajarla en niños y niñas: la primera pauta sería CONOCER las diferentes emociones que existen; dependiendo de la edad, hay muchas que los peques aún no reconocerán e irán descubriendo a medida que crezcan, pero ponerles nombre y saber distinguirlas es más útil (y más difícil) de lo que pueda parecer a primera instancia.

Hay muchas maneras de trabajar la inteligencia emocional pero, tenemos que tener en cuenta, que es una carrera de fondo.

La segunda sería RECONOCER EN UNO MISMO esas emociones, saber que las estoy viviendo, cuándo las estoy viviendo, saber qué siento, cómo estoy, cómo actúo… Y la tercera sería aprender a RECONOCER esas emociones EN LOS DEMÁS; saber si alguien que tengo delante está enfadado, triste, contento, aburrido… me va a ayudar a mejorar en mis relaciones interpersonales. ¿Cómo hacer esto? Ahí es donde entra ya en juego la imaginación, la capacidad de transmitir, entretener y educar de una forma eficiente. Y en eso es en lo que Aurrez Aurre os puede ayudar.

Para saber más sobre ellos visita su página web www.aurrezaurre.com

Para inscribirte a sus talleres en Txokolate escribiendo a contacto@aurrezaurre.com o llamando al 688624052